Rosa Angélica Ayala, habitante del municipio del Espinal, denunció a Fidel Ernesto Barrios por el delito de estafa, luego que según ella, éste prometiera por medio de cupos la posibilidad de obtener un apartamento en el sector de las torres Luis Carlos Galán Sarmiento.

En el año 2016, el mencionado por su cercanía con la familia Ayala, manifestó querer ayudarlos a conseguir un apartamento que apenas estaba en construcción, en ese primer momento les pidió 500 mil pesos para apartar el cupo.

Al presentarse ante la familia Ayala, el señalado se autoproclamó como funcionario de la alcaldía del mismo municipio, además manifestó que trabajaba como instructor del SENA (Servicio Nacional de Aprendizaje) en la misma ciudad consiguiendo su aprobación, dado que éste anteriormente había estudiado con el padre de Angélica.

Luego de un tiempo, Fidel Barrios le comentó a la familia que además del cupo para el apartamento, existía también la posibilidad de acceder a una vivienda de interés social comprándole un cupo por el mismo precio a un tercero que tenía acceso a las construcciones, en ese momento indicó Angélica que decidió pedirle al tramitador el cambio de intención por la vivienda, pues pensaba que sería una mejor inversión; junto con ella su madre decidió entregarle 500 mil pesos más para adelantar el proyecto.

Tras varios meses donde las denunciantes se comunicaban con él pidiendo más información sobre el proceso de la construcción y papeleo para su legalización, éste generaba más dudas que certezas, pues constantemente refería que el proyecto andaba sobre ruedas y que solo era cuestión de tiempo para la escrituración.

En los últimos meses del año 2017, Fidel se presentó nuevamente ante Angélica con la propuesta de modificar su inversión indicándole que había un nuevo terreno donde se podía conseguir con su ayuda una vivienda más grande, invirtiendo 500 mil pesos más, lo cual sumaría 1 millón más los 500 mil de su madre; tras esto, Ayala decidió averiguar por la veracidad de las palabras de Barrios, que después terminarían por ser mentira, pues la constructora dueña del proyecto no tenía relación con el tramitador.

Luego de un tiempo impulsada por las postergaciones tanto de dinero como de terreno, Ayala visitó la alcaldía donde se entrevistó con la secretaria de planeación de la alcaldía del Espinal, quien le indicó que Fidel Barrios no trabajaba con la institución, además se enteró que las viviendas prometidas habían sido entregadas a sus propietarios en el año 2014; una vez conocido esto, instauró la denuncia en la fiscalía en Abril de 2018.

Pese a lo ocurrido, en el transcurso de los dos años, el tramitador era contactado por teléfono y en ocasiones éste decía a los denunciantes que su celular fallaba y que no podía recibir llamadas a pesar que su estado en la aplicación Whatsapp era “en línea”.

Cristian Felipe Cortínez, esposo de Angélica Ayala, comentó que al llamar a Fidel Barrios, éste le propuso fechas para devolver el dinero a la familia; al momento del pago, mencionaba que una mujer no le había adelantado un dinero, seguido le pidió un nuevo plazo para pagarles.

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Según la denunciante, Barrios, ha contactado a más personas con la promoción de borrar multas de tránsito, ayudar a tramitar el impuesto predial y la obtención de vivienda.

En la actualidad el denunciado no ha respondido por vivienda, ni por el dinero que le adeuda a la familia Ayala, entre tanto el proceso en la fiscalía sigue su curso.

Cabe resaltar que este texto refleja únicamente la opinión de los denunciantes, pues no ha sido posible conocer la versión del acusado.