Sobre la 1:00 de la tarde de este martes 20 de abril terminó la crisis institucional que vivía el colegio Leonidas Rubio Villegas de Ibagué.

Cabe recordar que, desde el pasado 5 de abril, la mayoría de profesores del colegio se declararon en asamblea permanente en rechazo a la rectora Ofelia Hernández Rojas. 

Los docentes denunciaban malos tratos de la rectora, y además, la señalaban de tomar decisiones unilaterales que atentaban en contra de los procesos académicos que han posicionado al Leonidas Rubio como uno de los colegios públicos más importantes de Ibagué.

Pues bien, este 20 de abril, después de una reunión entre todas las partes, incluidos padres de familia y líderes comunitarios, se confirmó que Ofelia Hernández Rojas será retirada de la rectoría del colegio Leonidas Rubio. Así lo reveló a El Cronista.co el secretario de Educación de Ibagué, Juan Manuel Rodríguez. 

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"Al margen de aspectos administrativos que han sido parte de la discusión, hay un punto que fue fundamental, y es el relacionamiento de la rectora con la comunidad educativa.

Definitivamente en la reunión de hoy se evidenció que la relación de la rectora con los padres de familia, presidentes de Juntas de Acción Comunal, profesores, está totalmente rota. Eso impediría desarrollar adecuadamente las actividades académicas de la institución educativa, que es lo más importante", explicó el funcionario.

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El secretario de Educación detalló que 43 profesores, de los 65 que tiene el colegio Leonidas Rubio, pedían el traslado de la rectora. Situación que no se pudo solucionar, por lo cual Ofelia Hernández será trasladada a otra institución educativa y se buscará un nuevo rector para el Leonidas Rubio Villegas.

"Por ahora se asignará un rector encargado, mientras se busca a uno que asuma en propiedad, teniendo en cuenta el prestigio del colegio y la importancia que tiene para la educación en Ibagué. Pero lo más importante es que los profesores vuelvan a las aulas de clase y retomen todas las actividades académicas", apuntó Juan Manuel Rodríguez. 

El reto para la administración municipal consistirá en asignar a un profesional que sea capaz de reconocer e, incluso mejorar, el excelente trabajo que hizo el exrector Gustavo Ramírez Urueña durante más de 30 años. 

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"Este caso en concreto nos servirá para aprender y revisar cómo están los temas de convivencia en las distintas instituciones educativas y buscar soluciones apropiadas a los conflictos", concluyó el secretario de Educación.